sábado, 27 de junio de 2009

No nos podemos quedar callados ante tantas muertes inútiles

Ante la difícil situación que ha afrontado nuestro país, por lo ocurrido en Bagua, que no es sino el resultado de la intolerancia: ¡ no nos podemos quedar calladas!

Efectivamente, las muertes inútiles de tantas personas valiosas para nuestro país y en especial para sus familias, sólo tienen que llevarnos a la reflexión; si :¿vale la pena llegar a estos extremos de intolerancia, que haga que peruanos se maten entre peruanos?

No existen ninguna razón, argumento o justificación para que hayamos llegado al extremo ( en pleno siglo XXI), que seres humanos maten, torturen y masacren a sus semejantes, desarmados y rendidos.

Quiere decir que: ante los reclamos, sean justificados o no; ¿ es lícito dejar de aplicar hasta el más elemental derecho natural como es: el derecho a la vida?

Es por esto que: denunciamos las atrocidades cometidas contra nuestros policías, quienes ejerciendo con cautela y valentía su función, fueron brutalmente asesinados; igualmente, denunciamos la muerte innecesaria de los ciudadanos peruanos que perdieron la vida como consecuencia de estos actos criminales perpetrados por aquellos que, llevando a extremos sus protestas, afectaron y pusieron en riesgo el normal desenvolvimiento de la economía de nuestro país y de los derechos de otros ciudadanos.

Por otro lado, creemos importante exhortar a nuestras autoridades para que abran canales de comunicación con el pueblo, para el respeto de los derechos de los ciudadanos que todos tenemos; y principalmente el derecho a ser consultados cuando emitan normas que afecten la vida de un grupo considerable de personas; de regiones; áreas de desenvolvimiento económico o de grupos étnicos cuya cultura merece respeto, así como sus vinculaciones ancestrales con su territorio.

La democracia significa el gobierno del pueblo; sólo podremos tener una verdadera democracia cuando el gobierno central, los regionales, los locales, los congresistas y en general todos los funcionarios públicos; entiendan que: están al servicio de sus electores; y por consiguiente: deben de establecer los canales correspondientes para recibir las sugerencia, quejas, reclamos y en general cualquier idea o iniciativa, de sus ciudadanos para que se sienta que verdaderamente su poder depende de la delegación que le ha otorgado el pueblo.

En tanto sigan gobernando como una élite cerrada, en donde siempre estarán en el gobierno las mismas personas, los mismos asesores y el grupo que siempre está alrededor del poder de turno, dejando a los pobres que son la mayoría de lado y tratándolos como meros receptores de las normas que ellos dicten; seguirá habiendo más reclamos, mitines, paros y levantamientos. Debemos recordar que cuando un pueblo no tiene válvulas de escape para su reclamos, las calles se convierten en su mejor aliado, porque los gobiernos parecen reaccionar y escuchar a los ciudadanos, cuando estos toman las calles y generan el caos.

Dejemos la política de apagar fuegos y vayamos al ejercicio correcto de la democracia y significa: ESCUCHAR AL PUEBLO. No esperen que el pueblo se busque líderes equivocados que como en caso de Bagua, los conduzca a la violencia y a la muerte.

No hay comentarios:

Publicar un comentario